Para algunas personas le es conocido el saber que existen aplicaciones con el fin de entretener a canes y felinos, e incluso mas animales como ratones o sapos, pero los videojuegos también tienen fines diversos al del entretenimiento para los animales, al igual que en los humanos.
Candace Croney, una de las mayores
eminencias en el campo de la experimentación con cerdos, es una de las
primeras en considerar los videojuegos como vía para su estudio. Un juego de
asociación ayudó a a los cerdos a estimular su capacidad cognitiva: se
dispusieron dos monitores frente al espécimen, uno con varias figuras y otro
con una sola. Sirviéndose de su hocico y mediante un joystick, el cerdo tenía que
señalar la forma requerida. Al ser recompensado tras cada acierto terminó asociando
esto en su cerebro, llegando a resolver problemas lógicos más complejos.
Buscando que los orangutanes no se aburran en cautividad, la doctora Hanna
Wirman de la Universidad Politécnica de Hong Kong ha iniciado TOUCH,
proyecto cuya meta es familiarizar a los primates con la tecnología. En última
instancia se pretende el desarrollo de juegos basados en interfaces táctiles (y
con paneles más resistentes a los de cualquier smartphone o tableta
electrónica), donde los oranguntanes
puedan interactuar con cualquier parte de su cuerpo para ejercitar su memoria a
largo plazo.
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